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Deportivo Municipal cayó anoche sábado por la mínima diferencia (0-1) ante Alianza Lima en el Estadio Nacional, y donde se escribió una nueva jornada de pasión y aliento infinito.

Hoy presentan este resultado como la noche del rival, levantando castillos de arena, pero como en toda historia, siempre hay dos versiones. Aquí está la versión nuestra: Para quienes estuvimos en la cancha y en la tribuna local, en norte, como la antigua popular de los 70s, anoche existió un binomio en la cancha y en el cemento: la lucha y la pasión.

El Muni actual, un grupo conformado por referentes, canteranos y jugadores que apostaron por el club en un contexto difícil y ocasionado por quienes todos sabemos, jugó de igual a igual, y hasta más, frente a un plantel cuyo presupuesto nos supera en muchos millones de dólares.

Pero, en la cancha, son once contra once, y más el aliento inacabable de la banda más descontrolada, el sentimiento edil, se desbordaba por todo el Nacional.

En la primera mitad, Muni estuvo bien parado, atacando por todo el campo y pudimos abrir el marcador, pero el joven Santiago Campos no pudo definir, y el golero visitante, desvió el balón. Una de las jugadas de mayor peligro en los primeros 45′.

La visita tubo algunas acciones, y un tiro libre, que Steven Rivadeneyra desvió tras una espectacular intervención. El rival se vio nuevamente sorprendido, como en Matute semanas atrás, y se vio obligado realizar dos cambios en el primer tiempo.

Muni salió a la cancha con Steven Rivadeneyra; Jair Toledo, José Rugel, Francesco Cavagna, Jair Céspedes; Santiago Gálvez, Christian Flores, Jhosep Núñez, Martín Pérez García; Eslyn Correa y Pablo Erustes.

En la tribuna, la Banda del Basurero imprimía la dosis de fervor en el aliento. No paraba. Alentaba más y más.

Segundo tiempo

En el complemento, Muni siguió en la misma tónica de luchar y defender, el rival sacó a sus referentes, y aprovechó la única oportunidad clara que se le presentó a los 57′ por intermedio de Castillo.

La Academia no se amilanó. Y fue en busca de la paridad, la cual pudo llegar por intermedio de Erustes, que en un remate al arco, rebotó en el parante.

Muni perdía, y la banda alentaba más. Empujaba al equipo, empujaba el balón, pero este no logró anidarse en las redes.

A los 59′ ingresó Daniel Cabrera, ‘Cabrerita’, regresando al equipo después de tres años tras su inexplicada salida del club, por Daniel Cabrera. Ingresó también (70′) Dorian Moyano por Correa y Mathías Panduro por Gálvez (74′).

Tenemos la garganta destrozada, pero lo valió. Al equipo nada que reprochar, puso todo. Y al hincha, el que fue, el que alentó, solo nuestro reconocimiento. Y a la banda, ese galardón eterno que nos heredaron quienes ya partieron al infinito, y que nosotros dejamos a los más jóvenes.

Anoche me reencontré con mis hermanos, mi familia, la más descontrolada… hoy casi no puedo hablar, pero me recuperaré, nos recuperaremos, y el próximo fin de semana estaremos contigo Academia… contigo en las malas y las peores… Esto es Muni…

Félix Paz
LOSLOCOSDESIEMPRE

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